Los modelos de activación se emplean para establecer los niveles de peligro que activan los Protocolos de Actuación Precoz (PPA) de anticipación humanitaria. Estos modelos se elaboran utilizando el método Impact-Based Forecasting (IBF). Hasta ahora, hemos construido modelos que activan los EAP para los peligros de tifón, inundación, dzud, sequía y dengue.
Las etapas del desarrollo de modelos de activación incluyen: la realización de análisis de riesgos, el análisis de la capacidad de previsión de los productos de previsión de peligros, la creación de bases de datos históricas de impactos de peligros y la realización de modelos predictivos para determinar umbrales. El objetivo de este proceso es proporcionar plazos suficientes para la aplicación de medidas tempranas.
El modelo de activación para tifones, por ejemplo, se elaboró utilizando datos sobre exposición, vulnerabilidad y precipitaciones para predecir el porcentaje de casas que probablemente sufrirían daños graves en cada municipio. Para establecer el nivel de activación se utilizaron simulaciones basadas en tifones pasados. En caso de que se produzca un tifón, las predicciones del modelo, basadas en las previsiones, se comparan con el nivel de activación predefinido para determinar si hay que activar el EAP para tifones.

Entradas del modelo de activación de la sequía del IBF en relación con el calendario de activación del IBF
"Intentamos hacer frente a la naturaleza insidiosa y compleja de los peligros naturales actuando por fases para tomar medidas tempranas y actuar con un tiempo de antelación que reduzca el impacto del peligro".
Marijke Panis, Jefa del Equipo de Datos de 510